Este via crucis quiere ayudar a formar corazones que se dejen formar por Maria y aprendan a esperar y a amar a la Iglesia como Ella. La Iglesia necesita encarnar este rostro de mujer y madre, capaz de sostener a los amigos de Jesus en la hora de la oscuridad. Necesitamos que el corazon de madre nos impulse a salir de nuestra zona de confort, y a crear espacios donde todos sepan que siempre van a ser bien recibidos. Es la hora de unir nuestro corazon a Maria, para esperar con Ella el Pentecostes, e intuir que esta ya proximo, a las puertas. Veo este via crucis como una ayuda para formar el corazon femenino y materno de la Iglesia.(Marta Rodriguez, prologo)Te invito a que vengas conmigo a Jerusalen, con las mujeres, al momento en el que todo parece perdido, y juntas vivamos como late el corazon femenino en el trago mas amargo de Jesus, antes de vencer al mal, y que juntas vivamos el gozo de la Resurreccion.(Carlota Valenzuela, introduccion)