Los Demonios - Fiódor M. Dostoievski

Dostoiesvky mostrando su opinión de los movimientos radicales en la rusia Zarista es algo que debe ser visto. La edición no es especialmente detallada en algunos aspectos que otras editoriales aclararían con mayor precisión a través de notas al pie de página, pero para el precio, está más que bien.

Tamaño muy cómodo en caso de que viajes con el libro. Buena encuadernación, con tapa blanda. El tamaño de la letra es algo pequeña, pero completamente legible. La traducción es de Juan López-Morillas.

Bastante manejable, tamaño adecuado y excelente calidad de las hojas. Rico de leer y cómodo al tacto gracias a la textura que tienen las tapas.

Buena editorial, totalmente recomendable. Puntos a considerar: - No trae traducciones al pie de página de las muchas frases/oraciones en Francés. - Las páginas son muy delgadas, se puede transparentar el texto de la página de atrás, eso en algunos casos puede molestar.

Buena gestión, el libro llegó en buenas condiciones y rápido.

Llegó en excelente estado y dentro de plazo

Venía en buen estado y lo entregaron a los pocos días. Excelente trabajo. Sigan así

Muy buen libro

Muy buen servicio

EXCELENTE

me llegó super rápido a la puerta de mi casa.

Muy bueno

Bueno sellado, excelente

Es integro, pero muchos diálogos no vienen traducidos, los cuales son los de el personaje que habla en francés. Es imposible leerlo cómodamente sin escribir manualmente esos fragmentos en un traductor, este hecho hace que el libro baje mucho la calidad.

Llegó en la fecha establecida. El único defecto que tiene es que llegó un poco maltratado de las esquinas pero fuera de eso, todo está bien.

La novela es muy buena y la editorial es de las mejores, pero los materiales del libro no son de la mejor calidad, se daña con facilidad.

Obra maestra. Dosto entendió bien la naturaleza humana: sus personajes siempre giran en torno a quienes creen o niegan su existencia: trascendentistas (creyentes en valores universales, el hombre como caído o pecador); inmanentistas revolucionarios (crear "el hombre nuevo") o nihilistas ("nada importa, todo está permitido").