El Voyeur de la Ciudad (editorial sol 90) surge de la idea de que no me gusta demasiado pedirle a nadie que pose para mí, por lo tanto el trabajo de este fotógrafo consiste en pasar tiempo en un lugar, mirando detenidamente hasta que aparezca frente a mí una ficha más de ese rompecabezas que compone la imagen general. Si
estás a oscuras y ellos en plena luz, tu eres invisible. Y ese es en parte el secreto: