A principios de los años 70, Simón del Río apareció en el semanal Tintin. Su creador, Claude Auclair, pronto celebrará su trigésimo aniversario y todavía tiene una corta carrera en la bande dessinée. No importa. El tono literario de su Balada de Pelo Rojo, en la que deja patente toda su admiración por Jean Giono y su Canto del mundo, suscita de entrada un apasionado debate entre los lectores de la publicación. Pronto le seguirán El Clan de los Centauros y Los esclavos, dosA principios de los años 70, Simón del Río apareció en el semanal Tintin. Su creador, Claude Auclair, pronto celebrará su trigésimo aniversario y todavía tiene una corta carrera en la bande dessinée. No importa. El tono literario de su Balada de Pelo Rojo, en la que deja patente toda su admiración por Jean Giono y su Canto del mundo, suscita de entrada un apasionado debate entre los lectores de la publicación. Pronto le seguirán El Clan de los Centauros y Los esclavos, dos «Crónicas de los tiempos futuros», de tono resueltamente adulto y comprometido, situadas en un mundo post-atómico. Retorno a una de las series más estimulantes del semanal Tintin y a uno de los autores más entrañables de su generación.
