Titiritesa vive en el reino de anteayer. Su madre, mandolina, sueña con ver a su hija bien casada e intenta educarla como una cortesana refinada; pero su hija rechaza la vida convencional que le ha sido impuesta y no comparte las aspiraciones de su madre. Ante la inminente llegada de una institutriz, Titiritesa decide huir de palacio para vivir fantásticas y divertidas aventuras: visitar a un inventor de palabras, enfrentarse a un terrible monstruo, conocer a otra princesa de labios dulces un cuento atrevido, que aborda la homosexualidad femenina con humor, naturalidad y frescura, y celebra el amor sin prejuicios, pero con la sensibilidad necesaria para un lector infantil en la educación de la afectividad.